jueves, 27 de octubre de 2011

María Zambrano


"Y así, al filo del oído, de los errores que nos hace cometer, podemos discernir esa última y secreta, indefinible esperanza que nos habita de ser llamados por nuestro nombre por alguien y aun por algo que no conocemos, de oírnos llamar de una vez por todas, una voz que nos procure la íntima certeza de sabernos conocidos, conocidos del todo, enteramente identificados por alguien o por algo más allá de lo cotidiano". María Zambrano

No hay comentarios: